- Página taurina publicada Hoy por TAUROMAQUIAS.com en el diario El Men
La alcaldesa de Lima, Susana Villarán recibió el viernes 1 de abril la transferencia de los bienes de la Beneficencia de Lima de manos de Virginia Borra, ministra de la Mujer y desarrollo Humano (Mimdes). En otras palabras, la Municipalidad de Lima administrará entre otras propiedades, la plaza de Acho.
La noticia paraliza el proceso de inversión en usufructo de la plaza de toros al que se han presentado tres postores y cuya resolución es perentoria debido a que ya no hay tiempo para contratar los toreros y separar los toros para la feria taurina.
La verdad monda y lironda es que la Feria del Señor de los Milagros 2011 puede no realizarse y con ello la Beneficencia de Lima quedaría sin los ingresos que todos los años, desde hace siglos, provienen de un porcentaje de las entradas de Acho.
La ministra Borra declaró que para completar esta transferencia será necesaria la publicación oficial de un Decreto Supremo en el que se entrega la potestad a la Municipalidad de Lima de nombrar a los miembros del directorio de la Beneficencia. A partir de allí, la comuna iniciará la administración de dicha entidad.
La diligencia con la que la alcaldesa de Lima, Susana Villarán, decida cómo actuar es vital para la realización de la próxima temporada en Acho porque si la Municipalidad no sigue con el proceso, ni evalúa, ni concede la plaza a cualquiera de los postores en el menor tiempo posible atentaría no solo contra la feria sino contra la propia comuna ya que recibirían menos cantidad de renta, o ninguna.
Entre las instituciones que se verían afectadas por la falta de recursos provenientes de Acho están el Puericultorio Pérez Araníbar, que alberga y brinda atención integral a 336 menores en condición de vulnerabilidad, los Hogares de Adulto Mayor de Canevaro y San Vicente de Paúl, que atienden a 400 y 133 beneficiarios, respectivamente.
Asimismo, el Municipio de Lima es ahora responsable de un total de 82 centros residenciales gerontológicos, los comedores Santa Rosa y Santa Teresita que, en conjunto, atienden a más de 800 personas entre niños y adultos, quienes ahora pagan sumas simbólicas –que van desde 10 céntimos hasta un sol- por desayuno y almuerzo, y que ahora tendrían que pagar más debido a la reducción de ingresos de la Beneficencia.
Otros predios que ahora estarán a cargo del gobierno municipal son el Instituto Educativo Sevilla y el terreno donde funciona el Hospital de Salud Mental Víctor Larco Herrera
El proceso de usufructo se encuentra en la etapa de propuestas que acabó el 25 de marzo con la presentación de las empresas Catalaninca SRL, Consorcio Toros y Turismo, y Taurolima. Solo falta que la designación del nuevo empresario de Acho.
La actual gerencia también puede solucionar el asunto con urgencia, debido a que sigue en funciones en tanto que el presidente Alan García no firme el Decreto Supremo de transferencia. Otra posibilidad sería que se constituya una comisión de la Municipalidad para evaluar las propuestas junto a la actual administración.
Lo que no se puede permitir de ninguna manera es que se espere hasta acabar la transferencia para tomar una decisión sobre Acho pues eso significaría que este año Lima se quedaría sin feria taurina considerando el engorroso proceso de tomar la administración de 617 propiedades, de las cuales la mayoría corresponden a viviendas.
Freddy Villafuerte, gerente de Taurolima, explica otra de las razones por las que se acaba el tiempo para Acho 2011: “Nosotros somos los que iniciamos este proceso al presentar el año pasado una iniciativa privada en la modalidad de usufructo con un proyecto de inversión para recuperar y poner en valor nuestra plaza de Acho y, una vez evaluado por la Beneficencia ésta la derivó a la Superintendencia de Bienes Nacionales (SBN), quienes emitieron opinión técnica favorable. Vale decir que, en caso de que ganemos esta convocatoria, tenemos el camino allanado para poder firmar contrato de inmediato. En caso gane otro postor, tendrían que enviar su proyecto a la SBN a que los califique, esto puede demorar de dos a tres meses más, que fue lo que demoró nuestro expediente” advierte.
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