ECOS DE LA CORRIDA DEL DOMINGO 5 DE NOVIEMBRE. Feria del Señor de los Milagros 2006

PURISTAS Y PROFANOS

El triunfo del peruano Fernando Roca Rey en la corrida del domingo 5 ha suscitado una encendida polémica centrada en dos puntos básicos: ¿Mereció o no ganar las dos orejas, o solamente una? ¿Fue, su primera, una faena para la historia que quedará en el recuerdo de los aficionados?

Elocuente imagen de la estocada de Roca Rey a su primer toro de la corrida del domingo. (Foto: Arturo Pérez)

La discusión surgió en los mismos tendidos de la plaza al culminar la corrida y se ha extendido a todas las tertulias taurinas incluyendo un foro virtual organizado por la peña Desde el Tendido. Como suele suceder, en el debate concurren respetables argumentos y también pasiones, algunas subidas de tono que no respetan el punto de vista ajeno, otras profanas que no tienen muy en cuenta los cánones de la Fiesta Brava y también están las posiciones de los puristas y entendidos, quienes consideran que sus argumentos, desprovistos de todo apasionamiento chauvinista o patriotero, tienen la máxima autoridad y que están por sobre los de todos lo demás.

En el fragor de esta discusión, por cierto necesaria y en el balance final ilustrativa, quienes llevan la peor parte en el terreno de las acusaciones son el Juez de Plaza y sus asesores (directores de cambio de suerte), pero también llevan lo suyo los comentaristas de varios medios de prensa como El Comercio, La República, Perú 21…

A estos últimos se les reprocha no haber recalcado en sus crónicas y reseñas que el Juez supuestamente se excedió en otorgar las dos orejas y que debió dar solamente una solicitada unánimemente por el público, al extremo que el propio matador comprendió el exceso y dio la vuela al ruedo con solo un apéndice.

En lo que nos toca admito que en mi crónica de La República, por razones de espacio y la presión del tiempo en el cierre de un diario, omití dar cuenta de las protestas de una minoría del público contra las dos orejas y el gesto honrado del matadador de esconder en la chaqueta la segunda oreja. Sí, en cambio, señalo que fue un error de Fernando arrojar la muleta para ir a matar a cuerpo limpio. Repito, no tenía espacio para un mayor análisis.

Considero que algunos doctos y entendidos -no todos- exageran y caen en la apreciación subjetiva cuando argumentan que el premio, supuestamente exagerado de la segunda oreja, le hace daño al joven espada.

Hay quienes, en el otro extremo, sostienen que por el contrario es un gran incentivo para un torero nacional que se hace matador navegando contra la corriente, sin las grandes oportunidades que tienen los españoles y que hay que “levantarle la moral”, con las dos orejas e, inclusive, tocándole marinera apresuradamente.

Hay que comprender el entusiasmo y la euforia de la gran mayoría del público pues se trata de aficionados ansiosos de ver a toreros nacionales en la cúspide del triunfo. En la historia de la tauromaquia nacional durante el siglo XX han sido muy pocos los que han conquistado grandes triunfos: Rafael Santa Cruz (Escapulario en la novillada del 48). Rafael Puga, Freddy Villafuerte, Pablo Salas y Rafael Gastañeta, todos ganadores del Escapulario de Oro del Señor de los Milagros.

Después de la expectativa que creó este último, en la nueva generación apuntan con excelentes posibilidades Juan Carlos Cubas, Fernando Roca Rey y, más recientemente, el novillero Alfonso Simpson.

El actual Juez de Plaza Fernando Álvarez (ex matador de toros) declinó responder a las críticas que se le ha formulado y prometió hacer un balance general cuando culmine la feria, pero en medios allegados al palco de la autoridad se supo que en el caso de las dos orejas otorgadas en su primer toro a Fernando Roca Rey, se tomó en cuenta varios factores: la primera oreja la pidió unánimemente el público. Para el segundo apéndice se habría tomado en consideración que el matador estuvo en todo momento a la altura del compromiso realizando una excelente faena y que a la hora de matar entró con honradez y colocó una buena estocada que fue suficiente. (Ver arriba fotografía de Arturo Pérez de La República).

En lo referente a la negativa de dar dos orejas a la primera faena de Sebastián Castella, la autoridad habría considerado que, si bien el francés toreó formidablemente redondeando una bella faena no estuvo frente a un toro-toro. Advertimos que aquí estamos recogiendo versiones, testimonios como material de discusión y análisis y no estamos opinando, ni a favor ni en contra del Juez.

Compartimos plenamente las críticas a esa absurda vuelta al ruedo que se le permitió dar al Fandi. Fue un despropósito.

¿Que si la faena de Fernando Roca Rey quedará registrada en la historia y en el recuerdo de la afición? Creemos que el tiempo lo dirá. Lo que sí debemos esperar es que, como artista y buen profesional, Fernando continúe una carrera ascendente, mejorando y optimizando lo bueno que ya tiene y corrigiendo sus errores.

CITAS Y CITES

LEÓN Y GOLONDRINA

El 17 de noviembre se cumple un mes de la dolorosa desaparición del torero español Víctor Manuel Coronado. Su muerte acaeció en un accidente de tránsito ocurrido en Venezuela cerca de la ciudad e Maracay. Gustavo Jiménez Velarde, Pelusa, su apoderado en el Perú y entrañable amigo invita a la misa de honras en memoria de Coronado que se llevará a cabo el jueves 16 en la capilla de la plaza de Acho a las 7:00 de la noche. En el parte de invitación al oficio religioso reza un terceto que refleja la personalidad profundamente humanista y aventurera de Víctor Manuel: El descanso del guerrero / con fuerza de león / y alma de golondrina.

EL DEBUT

La mayoría de aficionados taurinos concurrimos por primera vez a una plaza de toros cuando somos muy niños. Es el debut, la primera prueba. Algunos nos quedamos prendados para siempre de la Fiesta Brava y otros la rechazan y no vuelvan más a un ruedo, es cuestión de afición. En la fotografía, al centro, programa en mano, mi nieto y ahijado Camilo Benites Soplín en la tarde de rejones que se ofreció en Acho el 4 de noviembre.

LA CHINGANITA DE ACHO

Doña Consuelo Bermúdez, atendiendo a sus parroquianos.

Aficionados de todos los distritos de la gran Lima, incluyendo los que provienen de barrios residenciales, se dan cita cada domingo de toros frente a sombra en el criollazo callejón del Jirón Hualgayoc 279 para saborear la riquísima frejolada, el caucau, y el cebiche y otras viandas preparadas por doña Consuelo Bermúdez, esposa del picador Antonio Coloma.


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